El trágico accidente ocurrido en la carretera Mérida–Campeche dejó un saldo de 16 personas fallecidas, la mayoría de ellas albañiles originarios de Calkiní que regresaban a su lugar de origen después de trabajar en Mérida. Ahora, sus familias enfrentan el doloroso proceso de identificar a sus seres queridos y trasladarlos para darles sepultura en sus comunidades.
En apoyo a los afectados, autoridades del Servicio Médico Forense (SEMEFO) y de la Fiscalía General del Estado (FGE) desplegaron unidades para trasladar los cuerpos a los municipios de Calkiní, Becal y Nunkiní, en Campeche. De acuerdo con la gobernadora Layda Sansores, hasta ahora se ha logrado identificar a cinco de las víctimas.
La mandataria estatal informó que continúan los trabajos de contacto con las familias y que se mantiene una estrecha coordinación con autoridades locales de Calkiní y del estado de Yucatán para agilizar el proceso. Subrayó que la prioridad es brindar acompañamiento y apoyo logístico a los deudos.
El Ayuntamiento de Calkiní también se sumó a las labores de respaldo, facilitando transporte y asistencia para que los familiares pudieran acudir a la ciudad de Mérida y llevar a cabo los trámites necesarios en el Servicio Médico Forense.
En tanto, el gobernador de Yucatán, Joaquín Díaz Mena, acudió personalmente al SEMEFO para atender a los familiares, expresar la solidaridad de su gobierno y garantizar todas las facilidades para la identificación y traslado de los cuerpos a sus comunidades.
La Fiscalía General del Estado de Yucatán confirmó que ya se abrió una carpeta de investigación sobre el accidente. Los primeros reportes apuntan a que el conductor de la camioneta tipo Van, que operaba como taxi colectivo, conducía a exceso de velocidad. Esto habría provocado que impactara primero contra un vehículo particular y posteriormente contra un tráiler de una empresa cervecera que circulaba en sentido contrario rumbo a Mérida.
La unidad de transporte colectivo tenía como destino Calkiní y trasladaba principalmente a albañiles que viajaban de regreso a casa. Horas después del accidente, el número de víctimas se elevó de 15 a 16 tras localizarse un cuerpo calcinado entre los restos del vehículo que se partió en dos e incendió.
Hasta la tarde del domingo se habían entregado ocho cuerpos a sus familiares, aunque el proceso ha sido lento debido al estado de los restos. Además, se confirmó que un pasajero sobrevivió y permanece hospitalizado en condición grave.
Con información de El Universal
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