Con una trayectoria que se remonta varias décadas atrás, la agrupación de trovadores Los Tachos de Valladolid recibió un homenaje a su aportación cultural.
A partir de ahora, el cuarteto, que lleva 75 años compartiendo ininterrumpidamente la música yucateca, forma parte de la galería de personalidades que se exhibe en las paredes del Museo de la Canción Yucateca.
La historia del grupo tiene sus orígenes en la década de 1940, cuando Anastasio Osorio Canché funda en Valladolid el grupo Los Hermanos Osorio junto a dos de sus hijos: 9 años tenía la primera voz, el recientemente fallecido Luis Osorio Cosgaya, y 13 años Carlos Daniel.
Se iniciaron con presentaciones en el municipio y sus alrededores, en eventos culturales y académicos y fiestas de amigos y familiares. De un momento a otro ya eran contratados en centros nocturnos. Con ellos simpatizó don Belito Sosa, figura de la radio y la promoción artística, quien les dio en 1949 el nombre de Los Tachos, mismo que continúa al Sol de estos días.
Posteriormente se les unió otro hermano, Pablo Anastasio, quien narra al Diario de viva voz la emoción de llegar a estos días, tras tantas aventuras musicales compartidas con sus hermanos.
Más adelante se les uniría Manuel Osorio Rosado, nieto del fundador y quien está cumpliendo 40 años como integrante del grupo.
Tras la pérdida de Luis Osorio, su hijo político Mario Arce Carbajal se une al conjunto para continuar con el legado familiar.
“No pretendo sustituirlo, eso es imposible. Esto es un homenaje, pues llevo más 40 años en la familia y también crecí con la música de Los Tachos”, comparte.
Sus familiares enfatizan cómo el espíritu de Luis Osorio perdurará en cada acorde y en la pasión que han mantenido viva.
“Es un homenaje a su memoria”, añade Arce Carbajal. “Yo no me comparo con él, con su voz, con la institución que ha sido para Los Tachos, sé que estaría muy feliz con este reconocimiento”.
Con respecto al óleo que se develó anteanoche para la galería del Museo de la Canción, Anastasio Osorio dice que “éste es un sueño que nunca pensamos que se haría realidad, es un gran festejo que nos llena de ilusión”.
Los integrantes de la agrupación agradecen por el reconocimiento al Museo de la Canción Yucateca y también a Maricarmen Pérez Domínguez, quien actuó en la velada de anteayer.
Anastasio Osorio señala que consideran a Maricarmen Pérez como una madrina, pues abrió caminos para ellos, y que recuerdan en especial el año 2001, cuando los llevó a representar la trova yucateca en el Festival del Bambuco en Colombia, los primeros en hacerlo.
Anastasio hace énfasis en el cariño y apoyo incondicional que ella les ha brindado, y la consideran una figura clave en su trayectoria, una pionera que, con su influencia y afecto, les apoyó para alcanzar el éxito.
“Tenemos grandes amigos, como Renán López, Gregorio Brito, Los Juglares, entre muchos, a quienes agradecemos su presencia en nuestra trayectoria”.
Los integrantes de Los Tachos dan asimismo las gracias a la familia Osorio por su unión, entrega y apoyo a través de las generaciones.
“La música siempre adelante. La buena música, la trova yucateca, nunca morirá”, enfatiza Anastasio.
Información de Diario de Yucatán
